Hoy en día estamos acostumbrados a las polémicas y agrias discursiones sobre la gestión del agua. Son famosos los controvertidos trasvases entre cuencas fluviales para abastecer de agua a distintas zonas de España para distintos usos.
Hasta no hace mucho, este producto tan necesario para los seres vivos, se iba a buscar a los pozos y fuentes públicas que estaban situados en distintos puntos de pueblo. Unos elementos tan utilizados y necesarios hasta hace unos años, hoy se han convertido en historia y forman parte de los rincones típicos con los que cuenta Villanueva del Duque.
En un corto recorrido por las calles nos encontramos con el Pozo de la Fuente Vieja. Situado junto a una aguada, construida recientemente para recrear la antigua forma de abastecimiento de agua. Las mujeres y los crío iban con los cántaros hasta la aguada para abastecerse de agua para beber y cocinar. También se cree que en esta parte del pueblo fue el lugar que dio origen a Villanueva de Duque. Rincón más laureado en las ediciones pasadas del Concurso de Decoración de Rincones Típicos que se celebra durante la Semana de Turismo Rural, en la presenta edición seguro que tienen preparada alguna sorpresa que nos recreen viejos y tiernos recuerdos del pasado. Seguro que será unos de los rincones más visitados durante la edición de este año, siendo un premio para los vecinos que llevan mucho tiempor trabajado para preparar la edición de este año.
No muy lejos a este punto, se encuentra la plaza del Morconcillo. En un lateral de la plaza nos encontramos otro pequeño pozo de granito. Recientemente restaurada la plaza, el Pozo del Morconcillo también es otro rincón que se engalanará durante la Semana de Turismo Rural.
En la zona oeste se situa la plaza conocida como de El Verdinal, en honor al pozo que se ubica en su centro, recientemente ha tomado el nombre del nuevo hijo predilecto de Villanueva del Duque, el escritor Alejandro López Andrada. Quizas sea la plaza con mayor sabor popular del municipio. El aspecto actual no es el tradicional, ya que el pozo original y la huerta verdial en la que estaba situado, ha sido ocultado por el caserío.
Al igual del resto de rincones típicos de Villanueva, se puede leer en uno de sus laterales las letras del escritor local Alejandro López Andrada.
También existen otros pozos y fuentes públicas, ya fuera del casco urbano, como son el Pozo del Egido, la Fuente del Paseo y la Fuente de Guía o la bonita fuente decorativa situada en la plaza de la Iglesia.
No podemos dejar de mencionar la Fuente del Viñón, que a diferencia de todas éstas otras no tiene brocal, sino que está a ras de suelo, y está situada a los pies de las Sierra del Viñón, de la que toma su nombre. Ésta fuente se encuentra rodeada de álamos y eucaliptos en un paraje de especial belleza, y aunque está alejada del casco urbano goza de una gran popularidad entre los villaduqueños.
Y durante nuestro paseo podremos contemplar varias muestras de casa que conservan la tradicional arquitectura de la zona con la utilización del granito y la cal. Además, recientemente se ha remodelado, o como se dice ahora, puesto en valor, un viejo callejón denominado "La Peñalá". Lugar de encuentro y de juegos de los muchachos del pueblo en el pasado y que, con el paso de tiempo y las construcciones que fueron apareciendo a su alrededor, fue cayendo un poco en el olvido. El nombre de Peñalá hace referencia al trozo de roca que aflora de un gran batolito de granito.
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(Alguna parte del texto han sido extraídos de la web de Villanueva del Duque)
[Esta entrada se publica conjuntamente en MTB | Los Pedroches]
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