A Chinchón en flaca

Por fin llegó mi primera experiencia seria encima de una flaca. Ha sido, como no podía ser de otra forma, con mi equipación de MTB Leganés y en un recorrido por las carreteras de zona sur de Madrid con destino Chinchón.

Para la ocasión he contado con el apoyo de Jero y Manolo, los cuales me han llevado cómodamente durante todo el recorrido librándome del aire y de los mosquitos. Agradezco de forma a especial a Jero, que durante las tres salidas previas que hicimos, siempre me ha motivado y animado a seguir con este otro tipo de ciclismo tan diferenta al que estoy acostumbrado.

Cada año me planteo un reto, algo diferente que superar y que me tenga con la mente entretenida. En esta ocasión me planteé realizar la Treparriscos que se celebra el próximo día 18 de Junio en la localidad oscense de Sabinánigo. El problema residía en que ni tengo bicicleta de carretera ni experiencia previa, por lo que había que ponerse en marcha.

Primero le pedí a mi amigo Carlos Zafak su vieja reliquia del pleistoceno con marcha en el cuadro y calapies. Luego, empecé a probar un par de veces por La Marañosa y la CdC para hacerme un poco con la posición, los cambios y frenos. Los cambios saltaban constantemente y sólo podía ir en plato pequeño y cambiar a los piñones intermedios. Tampoco podía pegarme mucho a los compañeros, ni apurar en las frenadas ya que los frenos tenía un retardo en su acción. ¡Algún susto me he dado! Incluso la estabilidad en la bici y mi inexperiencia me ponía en apuros en las bajadas. Pese a estos inconvenientes técnicos continué con la tarea.

El día elegido fue espléndido con una temperatura magnífica y un ligerisimo viento. El destino era también importante: Chinchón. El recorrido sin ser duro, tenía un poquito de todo que me haría probar todas las suertes del ciclismo: el llano, subidas, bajadas, etc ... Además las carreteras elegidas son frecuentadas por ciclistas, los que las hace algo más seguras y acostumbrados está los conductores.
El punto de partida fue el caserío getafense de Perales del Río, de allí seguiríamos por el carril-bici hasta San Martín de la Vega, localidad que bordeamos por su circunvalación para evitar atravesar el casco urbano. Una vez llegado hasta Ciempozuelo, seguiríamos hasta Titulcia pasando por su puente nuevo que salva el río Jarama. Tras el desvío de Morata, encontraríamos las primeras cuestas antes de llegar a Chinchón.

En este tramo me quedo un poco de mis compañeros por un problema con el cambio lo que me hace prácticamente parar y tener que comenzar sin inercia. En la entrada de Chinchón, me esperan antes de desencadenar el ataqué en el pavés de las calles de Chinchón. Los paseantes pensaban que éramos Gilbert, Purito y Samuel en la pasada Flecha Valona.

Tras la obligada parada en la Plaza de Chinchón y proveernos de líquido continuamos la vuelta, esta vez por Morata. Habíamos tardado hora y media en recorrer 45 kms y había que regresar en el mismo tiempo por motivo del bono-bici. Primero bajando por las cerradas curvas de la M-311, para tras cruzar el río Tajuña, subir hasta la cementera de Morata. Una vez en la M-302, volver a subir, para posteriormente bajar hasta Vallequillas. De aquí al punto de origen sin problemas pasando por la estación de cercanías de San Martín de la Vega y de subir La Marañosa. Un recorrido clásico entre los ciclistas de carretera que tenía que ser mi bautismo.

En total fueron 80 kms en 3 horas y cuarto que me dejaron las piernas como palos. La bici de carretera me ha dejado sensaciones diferentes al MTB, si bien no voy a dejar los recorridos por caminos y montaña, ya que es mi pasión, seguro que continuaré con la flaca para cambiar registro y percibir esas sensaciones distintas.

Solo puedo decir que la experiencia ha sido muy reconfortante y me encuentro confiado y animado en continuar en su práctica.

Como siempre os dejo el track GPS en Wikiloc.